Mi relación con la fotografía inició como el pretexto perfecto para pasar tiempo con mi Padre, él me transmitió mas que técnica, me contagió la pasión por la arquitectura, los museos, el ballet, la filarmónica y la cultura; continuó como una práctica terapéutica para relajar mi mente y para sacarme lo fisgón. Desarrollé una visión sensible, que aprecia lo que pocos ven, mira desde donde las cosas pasan desapercibidas, un gusto por el detalle, las formas, lo estético y los colores. Hoy es una forma de vida, no hay día en que no haga algo relacionado con la fotografía, es mi pasión. Soy tecnólogo por vocación, me dedico a ayudar a las empresas a vencer la brecha y rezago tecnológicos implementando plataformas digitales que les brinden experiencias extraordinarias y diferenciadas para conectar audiencias con servicios digitales. Me gusta pensar que trabajo transformando digitalmente a México para retribuirle tanto que me da.
Junto con «Ramona», mi primera cámara, recorríamos como turistas nuestra propia ciudad y cada vez salíamos mas lejos dentro de la república mexicana y posteriormente internacionalmente. Me acerqué a aprender con personas que admiro, profesionales que si viven de la fotografía, que cuando veo su obra solo pienso en llegar a ser tan bueno como ellos. Al inicio solo hacía paisajes y arquitectura en mis viajes, urbanismo y naturaleza, con el tiempo fui agregando un estilo propio y un discurso, me incliné hacia lo abstracto y el surrealismo. Empecé a crear imagen, inventar con la fotografía lo que no existe.
Hoy tengo un proyecto a largo plazo para dedicarme al arte y estoy generando inversiones para levantar capital que pueda fondear una galería y así evolucionar de un fotógrafo en solitario a crear colectivos donde se entrelace la obra de muchos colegas. Paso a paso y con mucho esfuerzo construyo el camino para vivir de la fotografía como el resultado de una práctica existencialista profunda y divertida. Vivo en descubrimiento, amo la luz y disfruto en el instante presente. Soy un hombre felíz, aprovecho todo mi potencial, tomo riesgos y genero posibilidades a través de acciones. Para mí el éxito es consecuencia natural del trabajo diario, creativo, efectivo y donde se entrega el corazón con inteligencia.
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